La Facultad sumó recursos especializados para ampliar y fortalecer los servicios a terceros de sus laboratorios
La incorporación de nuevos profesionales surge del programa DTEC dependiente de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica que promueve proyectos que favorezcan la inserción laboral de recursos humanos de la más alta calificación (doctores). Se busca orientar la aplicación de sus capacidades y habilidades hacia la transferencia de conocimiento a instituciones y empresas del sector productivo y de servicios para resolver problemas tecnológicos y aprovechar oportunidades de desarrollo socio-económico a nivel regional o local.
Dentro del proyecto, está contemplado que los laboratorios tengan además de la persona responsable, dos auxiliares. En esta línea, la Facultad incorporó 4 profesionales con título de posgrado y 6 profesionales más como auxiliares que tendrán como parte de sus tareas ampliar y potenciar el trabajo de servicios a terceros en el Laboratorio de Análisis de Metales en alimentos y otros sustratos (Lamas), en el Laboratorio de Industrias Cárnicas (LiC) y el Laboratorio de Investigación de Residuos en Alimentos (LIRA), beneficiando a productores y empresas agroindustriales de la región.
En el Laboratorio de Industrias cárnicas se sumó como parte de este proyecto a la Dra. Romina Fabre, Ing. en Alimentos egresada de la UNER y doctora en Ciencia Tecnología y Gestión de Alimentos por la Univ. Politécnica de Valencia. Con ella colaboran Viviana Rodríguez, licenciada en Genética en la Univ. Nac. de Misiones con una Maestría en Brasil y la Ing. en Alimentos Cristina Posadas con experiencia laboral en diversas industrias de la región.
La Dra. Fabre resalta que los servicios que se realizan en el laboratorio están dirigidos a la cadena de valor de la carne (productores, frigoríficos y elaboradores de productos) aunque también se llevan a cabo estudios para otros institutos de investigación. “Los servicios prestados comprenden asesoramientos en temas que involucran procesos productivos e industriales y determinaciones relacionadas con la composición química, con la calidad y con la estabilidad durante la conservación de carne y productos cárnicos.”
“La ampliación de la oferta actualmente está direccionada a incorporar servicios en el área de la genética, particularmente la identificación de genes relacionados con la calidad de carne de cerdo, lo que permitirá a los productores porcinos la selección poniendo énfasis en la calidad de la carne. También en la línea de carne de cerdo se están evaluando alternativas para mejorar la estabilidad y extender la vida útil durante la conservación de la carne fresca. Además, el laboratorio cuenta con un equipo NIR (espectrofotómetro infra rojo) que se está ajustando para realizar determinaciones en carnes permitiendo obtener resultarne un servicio analítico y de asesoramiento integral.”, detalló Fabre.
En el caso del Laboratorio de Análisis de Metales en Alimentos y otros Sustratos (Lamas), se incorporó la Dra Evelin Carlier como Directora del proyecto. Carlier estudió Microbiología en la Universidad Nacional de Río Cuarto, luego se doctoró en la misma Universidad en Ciencias Biológicas con una beca del CONICET y continuó con un posdoctorado. Su formación estuvo abocada a la biología agrícola, trabajó en ensayos inoculantes y en su doctorado investigó una cepa que promueve el crecimiento de las plantas que luego fue transferida a una empresa que hoy la comercializa. Trabajó en el sector privado en control de calidad y procesos y como docente. Hasta que tomó conocimiento de esta convocatoria de la Universidad Nacional de Entre Ríos y decidió tomar el desafío en febrero radicándose en Concordia.
“El proyecto contempla un relevamiento de las necesidades que tenían los productores con respecto a los análisis nutricionales. Dentro de esos análisis nutricionales nosotros ya tenemos desarrolladas técnicas y estamos ofreciendo estos servicios pero la idea es incorporar más nutrientes para determinar, reforzar lo que tenemos e incorporar más determinaciones”, explicó Carlier. Actualmente el laboratorio tiene un espectrofotómetro de absorción atómica y se han incorporado dos equipos más. “Estamos trabajando en la puesta a punto de esos equipos que nos permitirán ser mucho más operativos y recibir más cantidad de muestras”.
Los servicios que ofrece este laboratorio son análisis nutricionales de suelo, foliar, frutos, de agua, fitopatológicos (para la prevención y tratamiento de enfermedades pre y pos cosecha. También se hacen análisis en jugos, arroz, soluciones nutritivas de riego. Con estos análisis se provee al productor herramientas para un mejor manejo agronómico de sus cultivos. “Es importante que el productor cuente con estos análisis para el manejo sustentable de los cultivos y obtener más rendimiento y mejor calidad de la fruta. También hay servicios especializados. Los productores se acercan a nuestro laboratorio y juntos hacemos la investigación y desarrollo de lo que ellos necesitan, aclaró Carlier.
Evelin trabaja con dos auxiliares, la Lic en Biología Cecilia Cabrera y la MSC Ingeniera Mariana Jiménez Veuthey. Además el proyecto permitió contar con colaboradores a la Directora del laboratorio Dra Marina Zapata, la Dra Micaela Heredia, el Dr. Juan Martín Castagnini y el Dr. Fabio Quinteros.
Carlier explicó que en la primera etapa plantearon reforzar lo que ya se tenía y reforzar técnicas nuevas, hacer servicios especializados, hacer difusión sobre los servicios que ofrece el laboratorio y un relevamiento de las necesidades que tiene los productores con respecto a los análisis nutricionales. También, se plantearon como objetivo el desarrollo de alimentos funcionales como otra línea de trabajo y siempre respondiendo a las necesidades de los productores. “Tenemos un grupo interdisciplinario que tiene muchísimas capacidades todos tenemos fortalezas en distintas áreas y esas fortalezas son las que van a llevar adelante el proyecto”, subrayó la investigadora.
En tanto, para el Laboratorio de Investigación de Residuos en Alimentos (LIRA) se sumaron dos doctores. La Dra Ivana Alberini es la Directora del Componente de Contaminantes en Matriz Ambiental es Lic. y Doctora en Química de la Facultad de Ingeniería Química en la Universidad Nacional del Litoral. El doctorado lo realizó en el área de celulosa y sus derivados con una beca del CONICET. Luego realizó una post doc de Agencia donde trabajó sobre el efecto de la congelación sobre queso. También, paso por la industria en aguas provinciales y en Nestle Purina en control de calidad de los productos terminados de alimentos para mascotas y en un frigorífico en Villa Urquiza, Entre Ríos.
“Me enteré de esta convocatoria y particularmente me interesó la beca y el cargo docente ya que tiene una visión a futuro bastante extendida”. Ivana tomo el cargo el 1 de abril de 2015.
Por su parte, Martin Novoa está a cargo de la matriz agroindustrial, es Lic. y Doctor en Ciencias Biológicas egresado de la Universidad Nacional de Río Cuarto. El área de investigación en la que trabajó es en calidad de agua con indicadores biológicos focalizando en las algas y en parte bacterianas y en lagos. En su doctorado se dedicó a investigar sobre aguas superficiales en ríos y aguas subterráneas y en grupos más específicos de algas que son las diatomeas. Antes de finalizar el doctorado a través de una beca del CONICET, Novoa se dedicó a la docencia en la universidad y un terciario.
En 2014 finaliza el doctorado y tenía la posibilidad de continuar con un postdoctorado en la UBA. “Me enteré de esta convocatoria que me interesó mucho porque me permite poder seguir creciendo en lo mío con investigación, la parte de servicios a terceros y mayor estabilidad”, señaló.
Martín trabaja junto a dos auxiliares : la Ing Química, Paola Sinner (actualmente está haciendo un magister en ingeniería ambiental en la UTN) y la Ing. en Alimentos Belén Medina.
El ingreso de Novoa fue en septiembre de 2015, por lo que recién se encuentra preparando el plan de trabajo para adaptar el proyecto y los servicios que llevará a cabo. Mientras tanto se ocupa de los análisis de plaguicidas en aguas en sedimento, determinación de fitoplancton, conteo y determinación de algas. “La idea es trabajar junto con las auxiliares para hacer un trabajo interdisciplinario e integral desde la matriz agroindustrial que a su vez mi idea es que complementen los dos componentes. La idea es que haya una integralidad y que sea interdisciplinario y que el laboratorio funciones como una sola cosa” explicó el investigador.
En tanto Alberini, detalló que se busca incrementar los servicios que ya realiza el laboratorio de análisis fisicoquímicos en aguas y dentro de lo que es residuos de plaguicidas hay muchas matrices donde se hace la detección de residuos como agua, sedimentos de agua, arándanos, cítricos, pescado, arroz y que se ofrecen en general. Y agregó: “también estamos trabajando en todo lo que es el desarrollo de gestión de calidad del laboratorio con el objetivo de acreditar el laboratorio frente al organismo argentino de acreditación (OAA) ya que hay muchas industrias que necesitan análisis desde laboratorios acreditados oficialmente. Es desde ahí que el trabajo también desde ambos componentes uno de los objetivos será la acreditación del laboratorio para que eso aumente la posibilidad de oferta a otros ámbitos e instituciones”.
El laboratorio cuenta con un equipamiento especializado y amplio que permite hacer una gama de estudios y de investigaciones muy grande. “El objetivo principal de un doctor es básicamente hacer investigación es para lo que nos formamos entonces aparte de hacer servicios, generar nuevos implica una investigación previa”, señaló Alberini. En cuanto a las líneas de trabajo que tienen, Novoa señaló que “además de los servicios que se vienen brindando hasta ahora, la idea es poder utilizar este grupo de algas las diatomeas como indicadores de calidad y de contaminación química. Una vez redactado y aprobado el proyecto el año próximo seguramente empezaremos con la implementación”, puntualizó.
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